Al cabo que ni quería

Hay una frase que siempre escuchas en la maternidad "No me compro un calzón por darle a mis hijos" llega literalmente a mi vida,  y no es que quiera enseñarles mis carencias o mis grandes poseciones, pero si de verdades se trata en la vida de una madre, sabrán que la más grande prioridad son nuestros hijos y que se nos olvida concientemente nuestras necesidades. Me paro y aquí estoy, mirandome las zapatillas  que me compré en el 2015 y que han sido mis fieles compañeras, unas BBNB (Buenas Bonitas No Baratas) tampoco es que ande adquiriendo lujos pero si van a ir los kilometros que caminaré, ya saben la ruta de las madres, casa, cole,  mercado,  o cuando me decidí bajar de peso y correr por las mañanas (bajé 6 kilos), por lo menos comprar unas de calidad que resistan esos trotes un par de años; pues ya pasaron esos dos años y aún me aferro a ellas, viendolas bien aún estan para un trote más.  El punto aquí es que ponerse en la última  fila de las prioridades no te hacen buena madre, tampoco te condenan como la mas descuidada, simplemente tu mente se centra tanto en ellos que prefieres verlos bien, y en realidad es lo que nos hace felices en cierto modo, el modo maternal. Sin embargo te miras un poco y no estaría mal si una vez te cuelas y te pones en primera fila, ¡A ver permiso, permiso!, revisas las cuentas, aún hay cosas por pagar #Ches, me regreso al final de la fila hasta fin de mes 😱 y papá se pone detrás de mí 😂 esta vez esperaremos un poquito más, aún  hay tiempo, #AlCaboQueNiQuería 😂